Reducir a 0 la dependencia de la red en las horas clave de un negocio era un reto y lo hemos conseguido. En este caso, la instalación del Colegio Carlos V se ha convertido en un proyecto de referencia en el ámbito educativo que se ha ganado su espacio por méritos propios en un foro profesional de primer nivel como es la Feria Internacional de Energía y Medio Ambiente. Genera.
El proyecto, creado por Cubierta Solar, integra una combinación de paneles solares y baterías que permite al centro escolar, localizado en la localidad murciana de Águilas, poder decir que en las horas lectivas del colegio su consumo de la red eléctrica es igual a 0. Esta instalación es una apuesta innovadora por los sistemas de almacenamiento industrial que se traduce en un importante ahorro en la factura de la luz, cercano a los 9.000 euros al año.
Luis Navarro Buciega, gerente de Cubierta Solar, ha llevado al debate de Genera este caso de éxito con baterías compartiendo con los profesionales del sector los retos que traen consigo estas tecnologías, la importancia de saber hacer ver a las empresas sus posibilidades y lo interesante del momento actual para apostar por ellas, a raíz de las convocatorias de subvenciones para este tipo de sistemas.

Innovación, sostenibilidad, eficiencia y ahorro
La instalación del Colegio Carlos V se ha convertido desde su puesta en marcha el pasado verano en todo un referente en innovación, sostenibilidad y ahorro. Este proyecto de autoconsumo dispone de 47,88 KWp y está integrado por 114 paneles solares Canadian Solar con un sistema de almacenamiento con 18 unidades de baterías que suman 90KWh.
Durante sus horas lectivas, el colegio se nutre única y exclusivamente de energía fotovoltaica y la almacenada en sus baterías, tiene cero consumos de la red durante el día, evitando así hacer gasto cuando la energía es más cara (P1). Carga las baterías con excedentes de la fotovoltaica y de la red en período valle, cuando la electricidad es más barata. Por lo tanto, el colegio comienza el día con energía almacenada y en cuanto sale el sol se nutre de la fotovoltaica; el excedente no consumido pasa a las baterías.
Con esta apuesta por las energías limpias, el centro evitará la emisión de 40,48 toneladas de CO2 al año, el equivalente a más de 4.000 árboles.
